Obra de teatro
La obra de teatro “Migrantes: una realidad que golpea” se presenta en distintos distritos como parte de un esfuerzo por generar un mayor impacto en la sensibilización del público, especialmente en los jóvenes. A través de sus escenas, que reflejan situaciones cotidianas para muchas familias, la obra ofrece una representación realista y conmovedora de los desafíos de la migración irregular.
La obra es presentada tanto a estudiantes de centros educativos de la red pública como a aquellos de instituciones privadas, adaptándose a diversos espacios escénicos según su idoneidad. Esta producción fue escrita específicamente para apoyar los objetivos del proyecto y su montaje es propiedad del mismo, lo que asegura una total alineación con la misión de sensibilización.
La realización de cada presentación es posible gracias a la coordinación y colaboración entre el equipo técnico del proyecto, las autoridades educativas y locales. De esta manera, las acciones de sensibilización no solo alcanzan a los jóvenes, sino también a actores clave a nivel distrital, municipal y departamental, fortaleciendo el compromiso de toda la comunidad con la prevención de la migración irregular.
Talleres de Teatro Participativo
A través de esta técnica, se busca que las y los jóvenes identifiquen alternativas que les permitan tomar decisiones informadas y conscientes sobre su futuro.
Estos talleres no solo se centraron en explorar la migración desde sus causas y consecuencias, sino que también proporcionaron un espacio seguro para el diálogo, la reflexión y la construcción colectiva de conocimientos. Con el uso del teatro como herramienta pedagógica, las y los participantes analizan sus contextos, evalúan los riesgos asociados con la migración irregular y, lo más importante, comprenden las oportunidades y recursos que tienen a su alcance para alcanzar sus proyectos de vida sin exponer su integridad física y psicológica.
La experiencia del Teatro Participativo permite a las y los estudiantes visualizar sus aspiraciones y desafíos a través de la dramatización de situaciones cotidianas, fomentando un proceso de aprendizaje significativo que promueve el empoderamiento juvenil y el fortalecimiento de su capacidad para tomar decisiones con responsabilidad y autonomía.